Llevo tiempo sin escribir y cuando lo hago es con una incómoda irregularidad de la que ninguno de vosotros tiene la culpa.
Digo esto desde mi estado de salud que no pasa por su momento más óptimo y que, aunque ahora ya casi es bueno, me tuvo bastante tocado en las últimas 48 horas con un termómetro que me hizo compañía y que cada cierto tiempo me daba numéricas noticias, unas buenas y otras menos buenas, pero nada que no alivie un buen chute de paracetamol, una de las pocas ingestas que ha tenido mi cuerpo desde el pasado sábado.
Y me sirven estas ociosas horas para ver, casi por obligación, la televisión y para analizar desde mi llana perspectiva algunos programas a los que no acabo de encontrarles el sentido.
No es por dármelas de culto ni soy yo precisamente de ese tipo de personas a las que les gusta recalcar que no ven la televisión (aunque luego se maten a ver porno por internet) y todos conocéis mis gustos televisivos (Física o Química, Televisiones locales, etc), pero es que hay programas, concretamente uno, que no entiendo.
Estoy hablando de "Hombres, Mujeres y Viceversa". Lo habré visto ya unas 20 veces, por decir un número suficiente, y soy totalmente incapaz de encontrarle el sentido. No es que no me guste...es que no lo entiendo y no entiendo en qué consiste. Lo intenté, pero soy incapaz. Traté de verlo poniendo los cinco sentidos y no lo consigo. Lo veo, me puede entretener pero cuando acaba me deja exactamente igual que estaba sin saber quién es quién dentro del programa y sin saber el papel de cada uno, salvo el de su presentadora. Tampoco pretendo que aporte nada nuevo a mi vida, pero es que me empieza a preocupar que se empiecen a idear cosas tan modernas que mi caduca mente ya no alcance a entenderlas como cuando intentas enseñar a una abuelilla a programar el vídeo. En este sentido....me doy por perdido.
Para mi alegría, y cambiando un poco de tema, me acabo de enterar que lo mismo que me pasa a mi y que está haciendo estar "incómodo" en estas últimas horas le pasa a Belén Esteban, lo cual me hace sentir mucho mejor.
Aunque sólo sea por empatía.
Digo esto desde mi estado de salud que no pasa por su momento más óptimo y que, aunque ahora ya casi es bueno, me tuvo bastante tocado en las últimas 48 horas con un termómetro que me hizo compañía y que cada cierto tiempo me daba numéricas noticias, unas buenas y otras menos buenas, pero nada que no alivie un buen chute de paracetamol, una de las pocas ingestas que ha tenido mi cuerpo desde el pasado sábado.
Y me sirven estas ociosas horas para ver, casi por obligación, la televisión y para analizar desde mi llana perspectiva algunos programas a los que no acabo de encontrarles el sentido.
No es por dármelas de culto ni soy yo precisamente de ese tipo de personas a las que les gusta recalcar que no ven la televisión (aunque luego se maten a ver porno por internet) y todos conocéis mis gustos televisivos (Física o Química, Televisiones locales, etc), pero es que hay programas, concretamente uno, que no entiendo.
Estoy hablando de "Hombres, Mujeres y Viceversa". Lo habré visto ya unas 20 veces, por decir un número suficiente, y soy totalmente incapaz de encontrarle el sentido. No es que no me guste...es que no lo entiendo y no entiendo en qué consiste. Lo intenté, pero soy incapaz. Traté de verlo poniendo los cinco sentidos y no lo consigo. Lo veo, me puede entretener pero cuando acaba me deja exactamente igual que estaba sin saber quién es quién dentro del programa y sin saber el papel de cada uno, salvo el de su presentadora. Tampoco pretendo que aporte nada nuevo a mi vida, pero es que me empieza a preocupar que se empiecen a idear cosas tan modernas que mi caduca mente ya no alcance a entenderlas como cuando intentas enseñar a una abuelilla a programar el vídeo. En este sentido....me doy por perdido.
Para mi alegría, y cambiando un poco de tema, me acabo de enterar que lo mismo que me pasa a mi y que está haciendo estar "incómodo" en estas últimas horas le pasa a Belén Esteban, lo cual me hace sentir mucho mejor.
Aunque sólo sea por empatía.
1 comentario:
MyHyV es patético. A mí cuando me quedo en casa un día de semana lo que me gusta es ver Arguiñano. Siempre te echas unas risas con él y anotas una receta que luego nunca haces, ...
Publicar un comentario