miércoles, 31 de diciembre de 2008

Resumen del año



Es el último día del año y toca hacer resumen en todas partes. En los periódicos llevan una semana haciéndolos y recordándonos lo bien que fué la economía este año. En la televisión sólo ponen programas con "lo mejor del 2008" y en las radios los "sonidos del año". Ahora bien, como tenga que hacer yo un resumen de lo que pasó en el 2008 lo lleváis claro. Mi memoria bineuronal casi no se acuerda de lo que hice ayer así que como para acordarse de lo que me pasó a lo largo de los últimos 12 meses, pero lo voy a intentar.

Si recuerdo que fué en enero aquella fiestecilla en la que me iluminaron con los gintonics y que, por cierto, se repite este domingo. Espero que no me iluminen con nada nuevo que todavía hay mucho que investigar. En febrero era carnaval y una parte de la pandilla decidimos salir a cenar disfrazados de...ni me acuerdo. Lo que si hicimos fué la promesa de "el año que viene empezamos a preparar el disfraz muuucho antes...." (promesa incumplida año tras año). De marzo y abril no recuerdo ni papa. En mayo los días ya empiezan a mejorar y de ese mes guardo en la zona vip de mi mente el día que pasé con mi hija en su cole. Creo que disfruté yo más de ese día que ella. En junio las vacances familiares a Mallorca de puro relax. A ver si podemos repetir en 2009. Julio, como no, el Carmín de la Pola al que voy desde hace 20 años aproximadamente e ininterrumpidamente. Quien no va dirá que es un perezón pero hay que ir para ver la realidad. Y en julio, también, mi cumple. En agosto vacaciones, pero esta vez sin salir de la ciudad. En septiembre nuevo curso escolar y nuevo cole. Octubre es el mes del incio de este blog. Noviembre lo recuerdo frío y lluvioso y de diciembre destaco el dolorosísimo orzuelo que tengo ahora en mi ojo izquierdo y que me hace parecer a Rocky Balboa. Tengo miedo que esta noche alguien lo confunda con una uva y se lo zampe en un acto de subidón festivo.

Vamos, que el año no fué del todo malo y si el 2009 es igual que este, lo firmo ya aunque añadiendo, eso si, un cláusula antiorzuelos.

De nocheviejas anteriores recuerdo la de 1999-2000 en la que hicieron un especial de televisión de 24 horas por todos los paises del mundo y en el que cada país presentaba una actuación típica del lugar y recuerdo una de Perú en la que cantaban "Bienvenido don Futuuuuuuuuro, me alegro de conoseeeeerleeeeee". Aquella canción se me quedó pegada y jamás la pude escuchar de nuevo. Si alguien la conoce, por favor, que me lo haga saber. Esa nochevieja la pasamos en el mítico Hotel Los Lagos de Cangas de Onís al que, algún día, me gustaría volver.


Feliz año 2009 !!!!!!!!!!




martes, 30 de diciembre de 2008

Varias cosillas previas a Nochevieja

Hoy me regalaron una botella de ginebra y van 3 en el año de mi debut gintoniquero. En esta ocasión es una ginebra francesa que se llama G' vine (vease la foto) y de la que me hablaron bien. Ya os contaré. La cosa es que con las 3 botellas que tengo en mi mueble bar, que no deja de ser la parte superior de un armario corriente y moliente, y teniendo en cuenta lo que bebo en casa, creo tener ginebra suficiente de aquí a finales del 2010 y es que no se si os pasa, pero yo en casa bebo bien poco. Cuando vienen amigos y poco más. La última vez que lo hice fué viendo el Real Madrid - Sporting por la televisión. Me daba la sensación que el Sporting podía hacer algo grande y me dije "tío, vamos a hacernos un gintonic que esto promete". Pin pan, pin pan...hasta siete (goles en contra, no gintonics) y es que siempre tuve yo mucha visión de juego....

Mañana se acaba este 2008 y es momento de fiestas nocturnas en las que te meten unos claveles impresioantes por unas cenas de mucho lililí y poco lalalá, unas barras libres de marcas limitadas y botellones de 2 litros, unas sopas de ajo que yo nunca ví y unos churros que te dejan el estomago fastidiao hasta el día de Reyes (la culpa siemrpe es de los churros y nunca de la bebida). Pero entre todas las fiestas que se hacen en esta ciudad hay una que llama poderosamente mi atención. Es una cuya cena se hace en una pizzería, llamésmola "Pablo Ruiz" (me imagino que mañana girará hacia restaurante de alto copete) y que después te ponen un bus para ir a una fiesta privada en...una cafetería, (me imagino que mañana girará a discotecón de moda). Por la tontería te meten, si no me equivoco porque lo digo de memoria, 170 eurazos!!!!. Lo que si digo es que si los camareros de la fiesta son los mismos que los de la cafetería vale mas pedir todo de golpe, que la velocidad nunca fué su principal característica y lo digo por experiencia. Pues eso, que me parece pasarse un poco, la verdad.

Ayyy...si me hubiese tocado la lotería...



lunes, 29 de diciembre de 2008

Pichurris


Esta relación que mantenemos a través del blog ya va camino de su tercer mes y cuando una relación ya pasa de ese tiempo se puede empezar a considerar una relación medio seria y algo más que un "refresquín", que es la típica expresión de abuelilla que no está correctamente utilizada en este caso, pero que tenía ganas de sacar a la palestra (a la pilastra como escuché una vez).


La cosa es que las relaciones medio serias no son completas si no tienen una serie de cosas como puede ser una canción especial o una denominación parejera que es la manera que tu llamas a tu pareja o tu pareja te llama a tí y que, salvo contados casos, nunca sale a la luz pública. Esos términos se usan en contextos cariñosos y cuando se utilizan es que hay buen rollete, como por ejemplo: "Lolín, cari, me apetece un Dalky de fresa...". Pero cuando hay bronca a la vista es más común utilizar el nombre completo y si es compuesto mejor, al estilo de "Manuel Felipe, que sea la última vez que fumas en el salón !!!!".


Entre las denominaciones parejeras hay mil: Cari, Cielo, Amor, Cosita, Bichito, Churri, Prenda, Gordi, Culillo, Tesoro, Cuchirrimín, Sol, Mi Guacamole, Frijolito, Joyita (con J), etc, etc, etc. , pero yo para esta relación escojo "Pichurris" que me gusta más. espero que a vosotros también os guste.


Una vez, hace poco tiempo, iba yo montado, muy a mi pesar, en el "Pumarín-Somió" que más bien parecía el "Nueva York-París" por todo lo que tardaba y como me aburría saqué la antena y había una chica hablando con su marido, novio, rollete o bloguero y le llamaba "cari", pero no fué eso lo que llamó mi cotilla atención. Fué que cambiaba la voz de una manera exagerada. Cuando hablaba con Cari era la voz más empalagosa que oí en la vida y cuando habló con su abuela en la conversación posterior su voz se asemejaba a la de Pedro Almodóvar recogiendo un Óscar.


Bueno Pichurris, pues me alegro que todo vaya bien y que os echaba de menos!!!

domingo, 28 de diciembre de 2008

Inocente



Hoy es el Día de los Inocentes. Yo no sé si hace años este día era más secundado o es que con el paso del tiempo le empezamos a dar la importancia justa al 28 de diciembre. Yo, antes, era de los que salían de casa, tal día como hoy, con un cargamento de monigotes y rollo de celo a la caza de la víctima anónima que campaba a sus anchas por las calles de Gijón. Lo primero que hacía era leerme de pé a pá el periódico en busca de la típica noticia que resultaba ser una trola de las grandes. El año pasado ya no encontré ninguna y no sé muy bien si sería por la decadencia inocéntica o porque ya estamoes en un punto en el que me lo creo todo.


Si recuerdo una inocentada que me gastaron una vez en un restaurante gijonés cuyo nombre empezaba por El Perro que. Que conste que no completo su nombre para mantener a este establecimiento hostelero en el más absoluto anonimato y no perjudicarlo. Aquel día, que no era ni siquiera 28 de dicembre, nos pusieron un aperitivo previo a la cena. El aperitivo, denominado por la camarera "Frutos de Kiosco" consisitía en un vaso cargado de triskys, patatitas, 3d's y chetos. Así, tal cual, ni más ni menos y encima no me tocó el tazo de pokemon que se lo llevaron los de la mesa de al lado. Que nadie se piense que los frutos eran elaborados por ellos. Eran de bolsa de kiosco y me pareció una inocentada de lo más simpaticona. Lo que se debieron de reir los del restaurante a costa de los clientes de aquella noche tuvo que ser mundial. Que chispa tenían todos.


Si debo aclarar que el restaurante, por fortuna, ya no pertenece a quien pertenecía y, aunque no he vuelto, me consta que los "Frutos de Kiosco" ya no entran en sus planes de aperitivos.



Otra cosilla que poco tiene que ver con esto pero mucho con el blog. Si os fijáis en la parte derecha del mismo aparecen "Los últimos gintonics...". Ahí se pueden ver directamente los comentarios que hacéis ordenados por fecha de publicación. Era una petición que tenía pendiente desde hace bastante tiempo y que hoy, por fin, pude realizar, así que a leer y...comentar !!!

miércoles, 24 de diciembre de 2008

Nochebuena


Lo primero que quiero decir y aclarar es que .....no me ha tocado la lotería y por lo tanto y según reza el contrato, no hay mariscada para nadie y ya lo siento. Yo, que para estas cosas debo ser medio bobo, cuando hago este tipo de propuestas que suenan a falsedades me las imagino como si fuesen realidad. Me imaginaba en un restaurante a 10 o 15 personas cenando un mariscada y hablando de nosequé porque hay gente que lee este blog que es totalmente anónima (aunque hay otra gente que conozco perfectamente y con la que me tomaría una mariscada hoy y siempre). De todas formas y lo digo muy en serio, si me hubiese tocado la lotería hubiese invitado encantado de la vida. si algún día me hago famoso y la CNN me ficha para hacer una columna de opinión os invito, que os lo merecéis.

Lo segundo es disculparme por llevar cuatro días sin escribir. Creo que desde que esto empezó hace dos meses nunca había ocurrido. Lo siento y creedme que me sentía algo mal por no hacerlo.

Lo tercero es hablar ya de las navidades, porque hoy es Nochebuena y corresponde. Una Nochebuena extraña, porque todo el mundo que me rodea está con problemas gripales. Es como si Supermarrano extendiese sus viruses a todo el mundo pero yo gozase de la inmunidad supermarranaica (toco madera que me imagino que, tarde o temprano, caeré).

Todas las navidades me acuerdo de un reportaje que vi hace ya muuuchos años (como 30) en un programa que se llamaba "Vivir cada día" y que era la cuna de grandes interpretaciones. Aquel programa venía a ser lo que hoy es "Callejeros", más o menos. En aquel reportaje hablaban de la forma de pasar las nocheviejas de los españoles y salían un pareja cuyo ritual de año nuevo era, una vez pasaban las doce, desnudarse ambos. Mientras ella estaba en pelota y echada sobre la cama, él le echaba sobre su cuerpo un mogollón de gusanos (xorra, para que me entendáis y que seguro que la pillaba en Rafa, todo para la pesca) y luego se los comía. Desde aquello tengo varias preguntas a las que nunca nadie consiguió responderme:

  • La primera es: Pero tío, ¿Cómo eres tan cerdo?

  • La segunda es: Pero tío, tienes una mujer en tu cama y ¿le echas gusanos?

  • La tercera es: Querida amiga, ¿No tienes otro plan mejor para nochevieja?

Y un sinfín de ellas más. ¿Qué habra sido de aquella pareja?, ¿Seguirán juntos y con el ritual?, ¿Leerán este blog?, ¿Qué estarán haciendo en este preciso momento?, ¿Habrán comprado ya los gusanos de este año?.

FELIZ NAVIDAD!!!!!

sábado, 20 de diciembre de 2008

Cenas navideñas


No sé si me estoy poniendo un poco malo o es sugestión. La cosa es que hoy estuve con un tipo que decía estar fatal con un gripazo de la leche y va el tío y se me pone a toser en mi cara....pero sin poner la mano el muy marrano. Mecagoentuputisimamadre, pensé yo para mis adentros y es que era lo que me faltaba. Desde que ese gañán me hizo eso no es que me encuentre muy allá, pero voy a dar un voto de confianza a mi salud y pensar que mañana estaré mejor.


Es sábado noche y hoy toca quedarse en casa que hay cena de chicas y como chica no soy, pues me quedo en casa, encantado de la vida, con mi hija viendo pelis de navidad y comiendo pizza. El viernes que viene habrá cena de chicos y allí estaré, salvo que Supermarrano me haya pegado su gripe, claro.


Las cenas monosexuales (atención al término que me acabo de inventar, probablemente incorrecto y que se refiere a las reuniones en las que sólo van chicos o chicas, pero no mezclados) son, a mi entender, algo muy saludable para todos. Es necesario para todo el mundo tener un pequeño reducto donde poder hablar de ciertas cosas y hacer determinadas actividades que en otras circunstancias no se sulen hacer. Ojo!!, que con esto no quiero decir que las cenas mixtas sean aburridas ni muchísimo menos. Sólo quiero decir que hay momentos para todo y aunque las mayoría de las veces las cenas sean mixtas (no me encuentro yo muy contento usando esta palabra en este contexto), no está mal que alguna sea "monosexual" siempre que las circunstancias lo permitan. (Sigo pensando que no estoy expresando muy bien lo que quiero decir, pero opto por dejarlo tal cual y no borrarlo).


El lunes se sortea la lotería en lo que se puede decir que es el comienzo oficial de la navidad. Recuerdo de toda la vida como mi madre nos despertaba ese día con el soniquete típico de "nananionnninonanooooo, laliloliiiiiiiiiii peseeeetaaaas". Voy a intentar seguir con esa tradición, así que el lunes a las ocho de la mañana pondré la tele con el volumen a tope para despertar a todo el vecindario que son muy majetes, sobre todo el de abajo que lo quiero con locura, igual que a Supermarrano. Este año dicen que la gente juega más por la crisis. Yo estuve haciendo recuento ahora y juego una barbaridad. Si tengo suerte os invito a todos mis lectores a una mariscada. Queda dicho.
Suerte a todos!!!.

jueves, 18 de diciembre de 2008

Chipirones


Llevo todo el día con un antojo de chipirones de la leche. No sé que me pasa pero todo me huele hoy a chipirón y eso hace que me apetezcan mucho.

Pero no me vale cualquier chipirón, no. Tienen que ser chipirones de barucho de esos que cuando entras se te impregna el olor en la ropa y luego tienes que ir a casa a cambiarte para no ir dejando rastro, de sidrería con serrín en el suelo y camarero escanciando y salpicándote el cogote. Chipirones impregnados en aceitón con un rebozado similar a los petazetas y que dejan el plato con un charco de grasilla pro-colesterol. Chipirones de un color dorado producido de la mezcla de aceite y harinona. Chipirones de a 7,50 la ración.

Aclaro que no sólo me gustan ese tipo de chipirones que te destrozan el estómago, pero es que hoy el antojo que tengo es ese. Antojo que, ya adelanto, no podré cumplir salvo que llame a Telechipirón y mi calle esté en su zona de reparto.

La verdad es que en la vida hay muchos grandes placeres y uno de ellos es cumplir un antojo en el momento adecuado. Está claro que mi antojo de chipirones "grass" es puntual y mañana ya no lo tendré. Mañana quizás me apetezcan chipirones marinados acompañados de arroz salvaje y queso, por ejemplo o una tortillina de gambas con patatas fritas acompañadas de un quesito de El Caserío y que hacen una mezcla perfecta...
Y es que según el Instituto Murciano de Antojos (Antojomur) los españoles, a lo largo de nuestra vida, sólo podemos cumplir un 7,82 % de los antojos que llegan a nuestras mentes y de esos, el 97,23 % pertenecen a la categoría de "antojos gastronómicos", como el mío de los chipirones de hoy que, repito, no podré cumplir para mi desgracia antojera pero para mi beneficio estomacal. En cambio los americanos cumplen un 9,36% de sus antojos y me lo creo, que el dato lo publicó el Departamento Antojero de la University of Massachusetts que de esto saben...y mucho. Menudos son.

Cibercondria


Nunca antes había llegado a mis oidos y mi cerebro bineuronal ese término pero, por desgracia, si lo conocía. La cibercondria se refiere a la hipocondria cibernética que es una de las cosas malas que internet aporta a nuestras maravillosas y saludables vidas.


Ser hipocondriaco es una putada de las grandes. Todo el día acojonado al mínimo síntoma y como vayas a buscar esos síntomas al Google entonces date por jodido, porque en ese estado de nervios tu mente sólo es capaz de distinguir palabras que jamás te hubiese gustado escuchar y lo que es una simple alergia mañanera se puede convertir por arte de magia en un "te quedan 3 meses de vida como muchísimo y en el mejor de los casos".


Para hacer la prueba puse "dolor de cabeza" en el Google y en el primer enlace que sale se ve en letras bien grandes "Su vida está en peligro". No me digáis que no hay que ser un hijodelagranputa (perdonad mi lenguaje más propio del vulgo que de una educación anglosajona como la mía) para poner eso en una web sobre algo tan común como un dolor de cabeza.


Reconozco que tuve una época en la que sufría cibercondria pero ahora, por suerte, cada vez me lo tomo más a risa, que ya tenemos bastantes cosas en la cabeza como para andar fastidiándonos con eso. Como decía mi madre: "Que nadie se muere la víspera!!!" (una frase de esas de madre que no tienen demasiado sentido pero que te quedan grabadas en la cabeza).

miércoles, 17 de diciembre de 2008

Muertos en el armario


Hace unos meses un amigo me decía que todos tenemos algún muerto en el armario. Mi amigo me lo decía de una forma metafórica, aunque en el caso de aquel cliente que tuve que ir a visitar a su casa la semana pasada es más que probable que, efectivamente, en su armario hubiese uno, dos o hasta tres muertos a juzgar por la pestilencia.


Entre mis muertos os puedo confesar alguno y que seguro que alguien hay por ahí que también los tiene. Por ejemplo reconozco que me gusta bastante la última canción de La Oreja de Van Gogh (con esta confesión sospecho que cuando llegue a casa tendré la maleta preparada sobre el felpudo y la cerradura cambiada). También reconozco que hace pocos años estuve en un concierto de OBK (los que cantabán "Historias de amoooor, ojos que brillan con ilusioooooooón....") y, oye, vaya bien que me lo pasé. Y reconozco que estuve en la casa de GH!!! (esto si que es heavy). Estuve en la primera edición, la de "Quién me pone la pierna encima...." y fué algo casual. Pasaba por allí y...bla, bla, bla. En realidad no pude ver nada porque a varios metros de llegar la Guardia Civil no te permitía el paso. Me lo pasé muy bien viendo aquella edición de GH. Ahora no lo veo y no lo digo por quedar bien.


Mis muertos televisivos se pueden contar por miles. Ya sabéis que veo Física o Química, Lex o cualquier serie nacional y si es mala, mejor que mejor y daría algo por poder ver de nuevo "Al salir de clase". Y si no lo puedo ver en directo que es la mayoría de las veces, lo grabo que para eso se inventaron los vídeos. Por cierto, no me puedo olvidar de "Sensación de Vivir" con Brandon y Brenda Walsh, Dylan, Donna y Kelly. Me respingo y todo al recordarlo...
En lo gastronómico debo reconocer, que desayuno Colacao le echo dos de azúcar que así está "más dulcín" y que no como huevo frito. ¿Soy el único ser del mundo que no come huevo frito?.


Otra cosa y cambiando de tema: Este blog tiene una herramienta que permite ver desde dónde entran las visitas (aproximado) y cómo entran y me hace mucha gracia que una persona dió con el blog desde Madrid porque buscó en el Google: "olor a sobaco en el trabajo". Lamento la situación de esta persona y desconozco si habrá encontrado solución a su problema sea propio o ajeno. Sea lo que sea: Se bienvenido a este blog. "This is your house" (Escocia dixit).

lunes, 15 de diciembre de 2008

El día que pensaba que me había ido del mundo


Hace años tuve una experiencia paranormal que después resultó ser mas normal que para, pero os la cuento.


Viajaba yo en un autobús hacia Les Arcs que es una estación de esquí de los Alpes franceses. El autobús, que era de "El Chabolero", se estropeó antes de subir el puerto y cuando lo arreglaron era ya bien entrada la noche...pero subimos igual aunque estaba nevando y las condiciones no eran las mejores para circular por aquella sinuosa carretera.


Yo, cosa rara en mi, me dormí al poco de arrancar y mientras estaba en los brazos de Morfeo el autobús empezó a patinar por el hielo y a hacer cosas raras. La cosa es que el conductor pidió a todo el mundo que se bajase del bus para hacer una maniobra y todos bajaron. Todos menos yo, claro, que estaba soñando sabe dios con qué.

De pronto me desperté y levanté la vista encontrándome un autobús en marcha pero vacío (todos los demás estaba esperando fuera). Yo era el único pasajero de aquel fantasmagórico autobús. Ni os imagináis el acojone que me entró en ese momento que pensé (lo juro por mi madre): "Joder, hubo un accidente y la palmé. Menuda gracia". Las pasé realmente putas durante unos minutos hasta que el autobús decidió parar, abrir sus puertas y dejó subir al resto de los pasajeros.

Respiré aliviado porque, la verdad, no me hacía ninguna gracia espicharla por esa pijada. Ahora no tengo ningún trauma por aquello, pero igual me tomo un gintonic para celebrar mi regreso a la vida hace ya casi 18 años.

Reflejos


No sé porque se monta en Irak todo ese lío porque un periodista haya lanzado un zapatazo (dos mejor dicho) a Bush en el que el presidente saliente demostró sus grandes reflejos, cuando hace unos cuantos años en una humilde casa de Gijón ocurría algo similar y aquello no salió publicado en ningún periódico.


Pero no tuve yo la suerte del americano cuando mi hermano demostró su puntería en la modalidad de "Lanzamiento de Zapatilla de Cuadros". Coge el tío (mi hermano) su zapatilla abuelera derecha, la levanta con la mano a la altura de su cabeza y con un ángulo aproximado de 45 grados la lanza a una velocidad de 5 metros por segundo hasta que, dando vueltas, me impacta en todo el narizón en el que me quedaron grabados algunos cuadros de la zapatilla. La madre que nos parió a ambos, menudo galletón que me cayó!!!. Y por motivos que ahora no recuerdo y me imagino que él tampoco. Lo que si recuerdo es que yo estaba escondido debajo de una cama y acabé llorando como un descosido ante tal injusticia.


Está claro que mis reflejos no son los mismos que los de Bush y por algo no soy yo presidente de los EE.UU.

domingo, 14 de diciembre de 2008

Andy Kaufman

Lo primero que quiero decir es que como alguien me insinúe que hace falta que llueva le caneo. Estoy hasta las narices de la lluvia que mezclada con el frío es una de las sensaciones climatológicas más desagradables que existe. Me pasé el finde entre casa y el trabajo con un breve receso, eso sí, en el Psicotapas que cada día gana enteros para ser mi establecimiento hostelero favorito de esta ciudad.

Esa recomendación hostelera ya la había hecho hace tiempo y la mantengo. Me parece un sitio coqueto, entrañable y bien atendido. Un sitio en el que se puede estar perfectamente y que siempre te reciben de una manera agradable.
Lo que si quiero decir es que esta recomendación la hago a título personal, que somos todos muy diferentes y, a lo mejor, lo que me gusta a mí no le gusta al otro. Yo, de momento, estoy encantado.
Y hablando de recomendar, quiero hacerlo (recomendar) con una película que vi hace unos años en el cine y que me pareció muy buena. La peli en cuestión se llama "Man on the Moon" y la protagoniza Jim Carrey. Se la recomendé a mucha gente y me consta que nadie o casi nadie me hizo caso y lo entiendo porque Jim Carrey no es un actor de buenas películas y, por qué no decirlo, un poco carapijo.
La peli no es cómica. Si habla de la vida de un conocido y muy rarito cómico americano (Andy Kaufman), que sería como aquí, por decir alguno, Buenafuente, y que es una historia más trágica que cómica. Jim Carrey borda el papel y el argumento es bastante serio. Está basada en la historia real de este peculiar humorista americano que lo mismo le adoraban que lo detestaban.

La canción "Man on the Moon" de REM está dedicada a Andy Kaufman. Podéis escuharla en este vídeo de REM junto al Boss.


Ahí queda la recomendación, porque tiene pinta de ser la típica película que pasará por la historia sin pena ni gloria y es una pena. En serio. Y no penséis que Jim Carrey hace muecas que no las hace (salvo las que el personaje al que interpreta hacía en su vida real). Hace una interpretación casi exacta de la corta y enigmática vida de Kaufman.

sábado, 13 de diciembre de 2008

Positividad II

Esta tarde el amigo Pitu, debutante en este blog, dejó un comentario en el post "Positividad" que merece la pena leer. Para que no andéis "patrás y palante" os lo copio aquí:

Creo ser el hermano de la autora del primer comentario a este post, y quiero dar fe de la positividad de nuestra madre con unos pequeños ejemplos:-Yo no tengo la nariz grande y aguileña sino un "perfil griego" interesantisimo-Tampoco tengo los dientes apiñados sino una boca con mucha personalidad-A pesar de ser un tipo digamos "menudo", mi madre me regala siempre ropa una talla mayor porque aunque sea estrechin, engaño y tengo mucha caja.Los ejemplos podrian ser un miloon pero vamos que si te compras un piso de segunda mano en el centro te dira: "que zona mas guapa fiu, pa que quies un piso nuevo en el quinto coño". Y si te lo compras nuevo en Cabañaquinta la respuesta sera: "nuevin, preciosu, pa que quies uno centrico que ye de segunda mano y a saber..."Todo esto hace que uno vaya por la vida satisfecho de lo que es y de lo que tiene. GRACIAS PILI POR SER COMO ERES
13 de diciembre de 2008 19:04
Y me dió que pensar sobre la positividad de las madres o, al menos, de la mía. Mi madre, alguna vez, cuando éramos pequeños nos lavaba la cabeza con Mistol y nos decía: "Si es lo mismo sólo que sin perfume" y así estamos ahora todos los hermanos como bolas de petanca o el día que pretendía llevarme a la nieve con unas botas de descanso de esas de pelo con tacón !!!!. "Pero si no se nota nadaaaa". Y para que hablar del carnaval que me tocó salir a la calle con un disfraz de Superman....hecho de papel!!!. Jajaja. También se rumorea que mi madre inventó el concepto "merienda-cena": "Hoy merendáis fuerte y cuando lleguéis a casa pa la cama directos".
Todas estas anécdotas hacen que yo también, al igual que Pitu, me sienta tremendamente orgulloso de mi madre y lejos de contarlas para ridiculizar mi infancia lo hago porque estoy tremendamente orgulloso de haberlas vivido y las quiero compartir.
Viva la madre que me parió!!!!

Chifladura Nº 50

Como quien no quiere la cosa ya me planté en el post 50 de este blog. 50 posts en los que se habló de casi todo y así a lo tonto, de lo que menos se habló fué de gintonics y de helados demostrando que el título es como los títulos de los discos del El Último de la Fila que no tienen nada que ver con nada, como nada tiene que ver con nada lo que os voy a contar.

De la que venía esta mañana a trabajar, en el coche iba pensando, porque no sé si os pasa a vosotros, pero yo mientras conduzco pienso mucho hasta el punto en el que aparezco en algún sitio que nada tiene que ver con el destino previsto inicialmente. Pues bien: iba pensando en una pintada que hace muchos años estaba en una pared cercana al "Monte de Piedad", ahí donde la ruta de los vinos que se mantuvo durante bastante tiempo y que ponía: "Samantha nos la levanta".
Yo pasaba muchas veces por delante y muchas veces la leía y así me ocurre ahora que la tengo perfectamente fotografiada en mi mente bineuronal. La leía y pensaba: ¿Quién pintaría eso ahí?, ¿Que les haría el dueño del local que servía como lienzo a esas personas para que se lo ensucien con un triste grafiti?, ¿Quién narices era Samantha?, ¿Samantha practicaba halterofilia? y si no era así, ¿Qué era lo que levantaba Samantha a aquellas personas que se dedicaban a expresarse a través del dudoso arte grafitero?. Preguntas que jamás tuvieron respuesta para mi y que de cuando en cuando vuelven a mi cabeza para atormentarme con la incertidumbre.
Por favor, si alguien tiene respuestas a mis dudas que me las haga llegar, que estoy en un sinvivir desde entonces.
Un beso para Samantha allá donde estés.
PD: Lo de pensar en el coche está bien, pero lo mejor es cuando te echas una cabezadita. Yo lo que hago es poner un ladrillo en el acelerador, sujeto el volante con unas cuerdas para que no se vaya y cuando me doy cuenta ya estoy cerca de León. Ah! y otro día os cuento lo de tatuarse pupilas sobre los párpados.

viernes, 12 de diciembre de 2008

Olores

Voy a proponer que mi trabajo sea considerardo de alto riesgo, porque lo que me tocó vivir esta tarde no hay sueldo que lo pague.

Resulta que tuve que ir a llevar "mercancía" a casa de un cliente que estaba enfermo y nos pidió que le hiciésemos ese favor. Normalmente no vamos nunca a casa de nadie, pero ya que este señor es un buen cliente y estaba enfermo accedimos a su petición. El "chollo", como no, me tocó a mí y es que los chollos de "vete a..." siempre le tocan al menda lerenda.

Total que me planté en su casa de este señor de unos 80 años y nada más se abriese la puerta el olor que llegó a mi pituitaria fué como si me hubiesen dado un buen puñetazo en toda la napia. JOOder como olía aquella casa. Era un olor que nunca antes lo había olido. No era olor a mexiu ni nada parecido. No era olor a sobaco cebollero, era olor a.....qué se yo. El olor lo mantengo, para mi puñetera desgracia, en la nariz y no se me va de ninguna manera. Yo no sé si ese hombre tendría un cadáver en casa porque no sé como huelen los cadáveres pero no me extrañaría nada.

Esto me hizo plantearme lo jodidamente jodida que es la soledad. Este pobre hombre quizás no se de cuenta del olor de su casa, quizás no quiera que una persona vaya a su casa a limpiar una vez a la semana o quizás (no lo creo) esté a gusto con ese aroma- Eso sí: Tenía una tele de plasma que dudo mucho que la tenga el presidente de Sony en el salón de su casa.
Por favor, que nadie me malinterprete y piense que me río o me burlo de este señor. Más bien todo lo contrario. Me impresionó la soledad en la que vivía y lo tremendamente triste que eso debe ser. Quizás, la soledad, sea una de las peores cosas que le puede pasar a una persona. Todos disfrutamos de un buen rato de soledad, pero estar solo por obligación debe ser terrible. Ojalá nunca nos pase.

Viernes

Ya es viernes (por fin es viernes que dirían otros) y me doy cuenta que las semanas me pasan a una velocidad de vértigo y por lo tanto los meses, años, etc... . De aquí a fin de año el ritmo es rapidísimo y hay tantos compromisos que pasará antes de darnos cuenta.

También me doy cuenta y sufro porque he bajado mi ritmo de escritura. Esta experiencia del blog está siendo todo un descubrimiento para mí. Tengo algunos seguidores, algo que me sorprende y me agrada mucho. Recibo unas 10 visitas diarias, leo comentarios con muchísimo agrado y pienso en blog. Desde hace varios días cada cosa que veo, cada cosa que me pasa la traslado mentalmente al lenguaje blog, pienso si puede ser interesante y si así lo considero, la plasmo de la mejor manera posible. Este pequeño bajón de ritmo viene provocado por el trabajo, no por la falta de ganas, que las tengo...y muchas.

jueves, 11 de diciembre de 2008

Salamanca campero


En el post anterior (el de la positividad) salía la palabra Salamanca y no voy a esperar ni un minuto más para hablar de la segunda ciudad más importante en mi vida personal.

Yo no estudié en Salamanca, que es lo que podría parecer, pero me hubiese gustado mucho hacerlo por dos motivos: El primero que hubiese podido estudiar periodismo y el segundo que hubiese estado, al menos, cinco años seguidos en esa maravillosa ciudad. Tampoco tengo familia allí ni siquiera amigos. Puedo decir que en Salamanca no conozco a nadie para establecer un vínculo con la ciudad, pero, repito, es la segunda ciudad más importante de mi vida.


A Salamanca la conocí hace muchos años, en el viaje de estudios de octavo de EGB. Nos llevaron un fin de semana (la casa por la ventana) y como no podía ser de otro modo, allí me presenté con dos maletas. Posteriormente, con veintipocos años ya empecé a ir con mis amigos de fin de semana. Eran fines de semana aislados y procurábamos que, al menos, hubiese dos en el año.

Nos metíamos en las pensiones más baratas y eso tenía consecuencias, como aquella pensión atendida por el Dr. Jekyll, que por la mañana era encantador y cuando oscureciá era el auténtico gilipollas. O la pensión en la que nos hacinaban excepto a uno que lo metieron en una especie de celda con ventana enrejada y puerta metálica. Incluso aquella, que era un lujazo, en la que nos despertaba una manifestación dominguera protestando por nosequé. Y no me olvido del hostal Mindanao al que había que llamar a la puerta para entrar y una voz siempre preguntaba: -"¿Número de habitación?" y nosotros, afectados un poquillo, respondíamos "nffdigiff" (algo incomprensible) y ellos siempre abrían la puerta.

Esos cafeses en la Plaza Mayor a precio de billete de avión, esos pinchos acompañados de sus respectivas cañas en aquel que bajaba al lado del Burguer King y donde nos enteramos de la muerte de Kurt Cobain, esas copas en el Tiovivo, Morgana, Moderno, Puerto de Chus (de guiris), La Iguana y mil más cuyos nombres soy ahora incapaz a recordar, pero que los visualizo en mi cabeza.

Esos paseos para ver la Casa de las Conchas, el astronauta de la Catedral Nueva. Esos paseos a caballo amenizados con la agradable e intersante conversación de Paco Valverde.

Podría decir taaanto de Salamanca. Aquí me dejo mucho más de la mitad.




"Cuanto te quiero te quierooooooo, cuanto te quiero te quierooooooo...mi Salamancaaaaaaaaaaa, mi Salamanca camperooooooooooooooooooooooooooooooo" (Rafael Farina).

miércoles, 10 de diciembre de 2008

Positividad

Yo, que ni soy médico ni curandero, considero que una buena medicina de apoyo para curar los males es la positividad en grado extremo. Si estás enfermo, la positividad no te curará la enfermedad, pero te hará llevarla mejor. Si tienes problemas económicos, la positividad no pagará tu hipoteca, pero hará que vayas con la cabeza bien bien alta.

No tengo ni puta idea, pero siempre pensé que afrontar los problemas con positividad es tener la mitad del camino recorrido y lo que hará que cuánto antes echemos la vista atrás y nos riamos de lo ocurrido.
Dice mi madre, que de positividad sabe mucho (jamás conocí a una persona tan positiva como ella. De hecho no hace mucho me dijo "Hijo, que fuerte tienes el pelo". Jajajaja.) que si abrazas a los árboles te dan energía positiva.

Como pequeña muestra os quiero dejar este vídeo que tiene mucho de eso (de positividad, no de árboles). Poned los altavoces a tope, levantad vuestro culo de la silla y.....a bailaaaaaaaaaaaaaaaar!!!!!.


Ayyy, que recuerdos del Café Moderno de Salamanca. Anda que no bailé yo veces esta canción...

Me voy a abrazar a un árbol.

Madrid


Este fin de semana lo pasé en una capital europea. Queda muy bien y muy snob decir eso y no miento, porque este finde estuve en Madrid.

Madrid es una ciudad que potencia tu estado anímico. Si estás de mal humor te conviertes en ogro y si, por el contrario, estás de buen humor pasas a ser la persona más feliz del mundo (igual exagero un poquito, pero ahí se anda).

Es una pena que no haya parado de llover, pero eso no nos impidió hacer turismo al más puro estilo pueblerino. Dimos un paseo por la zona de Sol en busca de elementos navideños. Estaba todo hasta arriba. Las Administraciones de Lotería tenían unas colas de muuuuchos metros, los bares hasta la bola, las tiendas completas y la calle como un hormiguero. Además había sitio para que los republicanos celebrasen una manifestación por la calle Alcalá que hacía imposible desplazarse en coche. Todo cortado.

La iluminación navideña que en esta ciudad desde la que escribo tan tristemente de moda se está poniendo en los últimos años, era impresionante. Mucho color, mucha luz, árboles enormes de diseños modernos. Una pasada para un pueblerino como era yo en ese momento. Daba gusto pasear viendo eso, aunque sea bajo la molesta lluvia.

A la hora del tentempié pude comprobar algo que siempre había oido, pero que no me parecía cierto: En Gijón no saben echar una caña. Y es verdad que en Madrid te pides una caña y sabe distinto, tiene presión, espuma espesa. Desconozco la diferencia porque la cerveza es la misma y la temperatura, me imagino, vendrá regulada, pero sabe distinta. Mucho mejor allí que aquí. Mira que soy un defensor de esta ciudad y lo que pasa en ella, pero en las cañas no hay nada que hacer.

martes, 9 de diciembre de 2008

Que cosas....

Hay millones de cosas que se quedan en la trastienda de nuestras mentes pero, de pronto, las recordamos. Este recuerdo, gracias a YouTube se puede recuperar y lo comparto con vosotros. Recomiendo ver el vídeo completo, que es muy navideño y la música es preciosa.


lunes, 8 de diciembre de 2008

Perros de mazapán


Hoy es 8 de diciembre, lo que para mi significaba y pretendo que siga significando el comienzo oficial de la Navidad.

Cuando era pequeño (bastante pequeño) en un día como hoy solían venir a comer a mi casa mi abuela y mi tío el cura y nos solían traer de regalo, año tras año, unos perrillos de mazapán que vendían en Verdú, en la calle de Los Moros y a los que les ponían un cascabel atado al cuello. Los perrillos en cuestión yo los recuerdo bastante feos, pero lo que tenían de feos lo tenían de ricos, aunque, quizás, lo que más me ilusionaba de aquellos canes no era su sabor sino su significado. Entre los privilegios que gozaba al comenzar oficialmente la Navidad estaba el de atormentar a mi familia con un disco de villancicos que sólo me permitían poner hasta el 6 de enero, porque era capaz de ponerlo 20 veces al día sin cansarme, escribir una enoooorme carta a los Reyes Magos y llevarla al buzón real que instalaban en la juguetería Navarro de la calle Corrida.

Intento seguir la tradición de hacer oficial hoy el comienzo de las fiestas y no compraré perrillos de mazapán ni vendrán mi abuela ni mi tío el cura a comer a casa (tarea ya imposible), pero si dedicaré la tarde a poner el árbol, el Nacimiento y a inculcarle a mi hija la ilusión que yo siempre tuve por estas fechas. Lo que me da pena es que el alumbrado de las calles no empiece hasta la semana próxima para poder enseñárselo hoy mismo, pero no pasa nada por esperar 4 o 5 días.


Reconozco que tuve unos años en que la Navidad me daba más pena que alegría, pero que cierto es cuando te dicen que la ilusión la vuelves a recuperar cuando hay niños en casa.
Feliz Navidad

viernes, 5 de diciembre de 2008

Don Erre que Erre

Jajaja. El título de este post ya me hace reir, porque me recuerda a Paco Martínez Soria (que tengo entendido que en la vida real era un tío bastante borde), a sus películas que ponían (y no se si ponen aún) los sábados por la tarde y a mi amigo Ale que lo imita bastante bien y con mucha gracia diciendo aquello de "muy buenaaaaas". Jajaja, es que me estoy acordando y es buenísimo. Escrito no es lo mismo, pero si veis a Ale haciéndo además lo de "EstEEEban" o "El Flequi" podéis palmar de la risa.


Bueno, al grano, que mi idea inicial no era hablar ni de Paco ni de Ale, era de mi y de mi libro como diría Paco Umbral y del partido de pádel que jugué ayer. El pádel es un deporte que recomiendo 100 por 100 a cualquiera, pero más a aquellos/as cuya forma física va perdiendo esa alegría que tenía en la adolescencia y el resultado fué tremendo, en nuestra contra claro está.

No sé los años que llevo jugando a esto y debí jugar cinco millones de partidos y de esos cinco millones debí ganar tres (tres partidos, no tres millones), ni más ni menos y uno de ellos contra un pobre hombre que era manco (igual no es políticamente correcto decir manco). Esto que suena a chiste barato es cierto. A aquel hombre le faltaba un brazo y, lógicamente, cogía la raqueta con el otro. Un ejemplo de hombre porque él, aún con alguna dificultad, estaba allí luchando como el que más. Creo recordar que, efectivamente, aquel partido lo ganamos, pero no fué nada fácil. Por cierto, un tío encantador.

Soy malo malísimo en cualquier deporte. Los hay que tienen facilidad y todo se les da bien. Pues yo soy del lado opuesto. Me gusta hacer deporte pero debo reconocer que no tengo una especial habilidad y menos mal que soy buen perdedor, que si no iba jodido. Cuando había partidos de fútbol a mi siempre me escogían el último y eso si me escogían, que a veces me tocaba hacer de utillero o de árbitro o cuando me puse a nadar en San Sebatián en la playa de La Concha intentando llegar a una plataforma que había en medio del agua y casi me voy del mundo. Y otro día os hablaré detenidamente de mis clases de pilates que también tienen delito.


Pero yo, como soy como Don Erre que Erre pues ahí sigo haciendo deporte, jugando a padel y perdiendo sin parar pero disfrutando.
Me quedo con ganas de hablar de Paco Martínez Soria y sus películas. Lo dejaré para otro día.

jueves, 4 de diciembre de 2008

Maletas

Este fin de semana, que para muchos es largo, pero para mí es "estándar" ya que trabajo el lunes, aprovecho para hacer una excursioncilla urbana de esas que tanto me gustan y por lo tanto toca preparar maleta (en singular).

Cuando hago este tipo de salidas hay dos cosas que me dan tremenda pereza: Conducir y hacer la maleta.

Yo soy de esos que hacen la maleta "por si acaso" que es lo mismo que llevar todo lo necesario y todo lo innecesario: Por si acaso llueve, por si acaso hace frío, por si acaso viene un aire del Sáhara y hace calor, por si acaso el hotel tiene piscina, por si acaso voy al casino y hace falta ir de esmoquin, por si acaso salgo de copas y la ropa me huele a tabaco, por si acaso me rompe un pantalón porque me caiga en la calle y necesito otro, por si acaso el sustituto del pantalón roto se ensucia y necesito un tercer pantalón, por si acaso el pijama no es suficiente y hace frío y tengo que llevar calzoncillos largos de felpa, por si acaso me da la venada y de pronto cambio el destino y cojo un avión al Polo Norte, por si acaso entre los huéspedes del hotel deciden organizar un partido de fútbol y tengo que llevar botas de tacos de aluminio, por si acaso me da por jugar al padel y necesito la raqueta, por si acaso ...

Esto que suena a coña es relativamente real. Recuerdo que en mi luna de miel estuve en París y me llevé mis playeros (deportivas para los de fuera) por si salía a correr por Les Champs Elysees. Jajaaja, pero si en la puñetera vida salgo a correr !!!!, y mis amigos recordarán cuando, con 16 o 17 años, fuí a pasar una noche a Luanco con 2 bolsas de deporte de las grandes!!!!. Cuando me vieron bajar del Alsa fliparon en colorines o las maletas que suelo llevar si me voy una semana en verano a la playa que incluyen todo tipo de calzados, camisas, etc. y que la mitad vuelven sin haber sido tocados.
Este fin de semana, por si acaso hay wifi, me llevaré el portátil y así os puedo escribir un poco, que me lo paso muy bien. Besos.


miércoles, 3 de diciembre de 2008

Literatura Infantil


Existe un cuento infantil precioso (para mi gusto, claro está) que se titula "¿A qué sabe la luna?". En el cuento se relata como varios animales de distintas especies se unen para intentar atrapar algo tan lejano como la luna y poder probar un pedacito de ella. Una vez que, entre todos ellos, lo consiguen ese pedacito de luna les sabe a "lo que a ellos más les gusta" (al ratón le sabe a queso).

Es un cuento que decubrí gracias a mi hija y creo que nunca me cansaría de leérselo. Me parece sencillo, entrañable...El mensaje lo puede interpretar cada uno como quiera. Mi interpretación es que nada ni nadie puede meterse en el medio de una ilusión y que si quieres hacer algo y realmente te lo propones, lo acabarás consiguiendo teniendo al final una buena recompensa.

Yo siempre fuí tremendamente malo para interpretar libros, cuentos, películas, canciones... y no se porque me da que esa (la de la mala interpretación de los mensajes) es una cualidad más masculina que femenina.
Al igual que los animales del cuento, no podemos amilanarnos a la primera de cambio y dejar de hacer aquello que nos apetece (siempre dentro de un respeto) para que luego con el paso del tiempo, echemos la vista atrás y nos pese no haberlo hecho. Siempre que sea posible hay que intentarlo.
Disfruté de ese cuento cada vez que lo leí y cada vez que se lo leí. Si tenéis hijos pequeños y no lo conocéis, es una buenísima recomendación.Justificar a ambos lados
Una pregunta, ¿A qué os sabe la luna a vosotros?

martes, 2 de diciembre de 2008

Un poco de estrés

Hoy tuve un día de esos perros perros, pero nada grave. Que nadie se preocupe. Pero fué un día en el que el maldito estrés iba creciendo según pasaba la mañana y no consiguió empezar a bajar hasta mediada la tarde.

Lo que no me imaginaba yo, allá por octubre, era que escribir este blog iba a servirme como una especie de terapia relajante con la que disfruto cada día más.

El estrés venía provocado por asuntos laborales, pero para culminar, estuve al mediodía en un centro comercial donde quise comer algo antes de empezar con las primeras compras navideñas.

Mira que no habrá sitios para comer en un centro comercial que aunque no sean sanos se disfrutan: McDonalds, Burguer King, Vip's, Gino's, Pizzamóvil, etc, etc.

Pues el gilipollas que suscribe se decidió por un bareto que ofrecía pinchos en la barra al más puro estilo de cafetería de ciudad. No sé porque se me pasó por la cabeza quedarme allí ni qué fuerza hipnótica hizo que mis pasos se dirigiesen hacia ese inhóspito local. Allí pedí un pincho de pollo que alcanzó el título de "pincho de pollo más malo del mundo". Estaba duro como una piedra de molino, empanado con un pan rallado que parecía arena de obra y el camarero, agradable donde los haya, me lo tiró encima de la barra desde una distancia aproximada de 2 metros. Allí se quedó el 87% del pincho y mis ganas de volver a entrar a sitios en los que nadie me llama.

Mi estrés, afortunadamente, ya pasó y prometo que la próxima vez que tenga un McDonalds cerca y necesidad de comer no le seré infiel a un buen cuarto de libra.

lunes, 1 de diciembre de 2008

Cine del malo

Vaya putada. Ayer estaba yo de eso de haber salido un poquitín (poco poco) el día anterior en casa metidín, calentín con un poco más de sueño del habitual cuando me decidí a ver una peli para tener entretenida a mi mente.


No voy a presumir aquí de mi gusto cinematográfico porque, entre otras cosas, debo ser el único habitante del planeta Tierra que no le gustó "El Silencio de los Corderos" y que tampoco le gustó la serie "V" donde los protagonistas se jampaban ratones como si fuesen pimientos de Padrón.


Pero es que la peli que vi ayer por la noche era completamente infumable. Se llamaba, creo, "Los líos de Gray" y no había por donde cogerla. Trataba de dos hermanos (chico y chica) treintañeros que compartían piso en Nueva York, él se enamoraba de una chica (a la que conocía una tarde, se enrrollaban esa misma noche y se casaban en la misma semana igual que ocurre en la vida real) y ella...también se enamoraba de la misma chica y futura cuñada a la que le "iba más el pescao que la carne", como diría Falete. No sigo que me deprimo, pero es de lo peor que vi yo nunca. Ahhhhhh!!!.

Reconozco que no soy yo muy aficionado a ver películas, que me duermo en el cine con mucha facilidad (aunque me encanta ir al cine) que rara vez veo una peli en casa , pero de vez en cuando y gracias a dios, hay películas que las ves y te dejan huella. Pelis que te apasionan, que acabas de verlas y luego tienes una especie de satisfacción interior muy agradable.

Entre ese tipo de películas "satisfactorias" y así a botepronto tengo "En el nombre del padre". Esa película me impactó desde que empezó y a día de hoy, cuando la recuerdo, me respingo. También me gustó mucho Forrest Gump la primera vez que la ví en los cines que estaban en el piso de arriba de Los Fresnos o Moulin Rouge con la que me pasó algo raro: Eché un "pigacín" en mitad de la peli, pero así todo salí del cine diciendo que me había encantado (ahora pienso qué igual dije eso porque si decía que me había dormido mi vida corría peligro físico).


Y otra que me recomendaron y la cogí en el videoclub fué "Hotel Rwanda". Es durísima y buenísima. Merece la pena verla. En serio.

Ahora sí, "Los líos de Gray" si la tenéis en vuestras manos soltadla inmediatamente y no digáis que no avisé. La putada no era ver lo malísima que era la peli, la putada era que esta vez no conseguí dormirme ni un solo minuto.