Hace poco más de un año y a través de este mismo medio daba la enhorabuena a un amigo por cumplir su sueño ferroviario. Hoy, 25 de abril de 2010, otro amigo mío también ha cumplido su sueño.
Después de 42 kilómetros y 195 metros que empezaron a las nueve de esta mañana por las calles de Madrid consiguió pasar la meta. Una meta que representaba mucho más que una carrera concluida.
Para él ya era algo muy bueno estar hoy allí, pero terminar esa carrera es, estoy seguro de ello, una de las cosas más emocionantes que hizo en su vida, porque correr una maratón es un esfuerzo físico y mental máximo (que cada uno se haga una imagen mental de lo que son 42 kilómetros y que se imagine correrlos), pero es un esfuerzo personal de cada uno. Es una carrera en la que llegar a la meta es la victoria personal de cada participante y por eso mismo, hoy mi amigo...ganó.
Enhorabuena y a pensar ya en otras metas.
Después de 42 kilómetros y 195 metros que empezaron a las nueve de esta mañana por las calles de Madrid consiguió pasar la meta. Una meta que representaba mucho más que una carrera concluida.
Para él ya era algo muy bueno estar hoy allí, pero terminar esa carrera es, estoy seguro de ello, una de las cosas más emocionantes que hizo en su vida, porque correr una maratón es un esfuerzo físico y mental máximo (que cada uno se haga una imagen mental de lo que son 42 kilómetros y que se imagine correrlos), pero es un esfuerzo personal de cada uno. Es una carrera en la que llegar a la meta es la victoria personal de cada participante y por eso mismo, hoy mi amigo...ganó.
Enhorabuena y a pensar ya en otras metas.
1 comentario:
Bien hecho compay, celebremos este éxito con un GT de MG con perejil y pomelo.
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