jueves, 27 de mayo de 2010

Rizando rizos


AVISO: En este post voy a hablar del final de la serie "Perdidos". Si aún no has visto el final y tienes intención de hacerlo te recomendaría por una parte que no siguieses leyendo y por otra que esas dos horas que ibas a dedicar a ver ese último capítulo las dediques a cosas mucho más interesantes como puede ser la investigación sobre el comportamiento del escarabajo pelotero en situaciones de máximo estrés o a realizar un collage formado con legumbres que luego pueda servir para adornar tu habitación. Saldrás ganando.


Ayer tuve la suerte de ver el último capítulo de "Perdidos" y digo suerte por un par de razones. En primer lugar por haber llegado hasta aquí tras seis temporadas de una serie que empezó muy bien (recalco la palabra "empezó"), y en segundo lugar por quitarnos del medio esa incertidumbre en la que estábamos metidos desde el primer minuto de la serie, cuando el avión se estrella en una isla desconocida.


Se habían ido metiendo los guionistas en muchos berenjenales. Berenjenales de los que no sabían cómo salir y los que veíamos la serie sabíamos que era imposible salir de todos ellos. Ellos, los guionistas, nos prometían que todos esos líos se iban a resolver en el último episodio y así nos tuvieron viendo temporadas y temporadas con la esperanza de resolver los misterios en el último capítulo. Era algo así como cuando una persona que debe dinero a otra le da largas diciendo que pronto se solucionará todo, pero esa solución nunca llega. Algo parecido.


Ese capítulo final llegó y los guionistas no supieron resolver ni uno solo de los enigmas planteados. Merece la pena escuchar el diálogo final entre el padre muerto y su hijo en el que están como cinco minutos hablando y no dicen absolutamente nada. Es un diálogo completamente vacío y en el que parece que los guionistas, como son guionistas de LOST, se permiten hacer este tipo de diálogos sabiendo que nadie les dirá nada y todo el mundo hará interpretaciones, quedando nosotros como los ignorantes y ellos como los que todo lo saben.


En pocas palabras, que me siento estafado como seguidor de esta serie, pero algo me hacía sospechar de ello desde hace tiempo, aunque tenía una mínima esperanza de resolución.... Que pena de final, con lo bien que había comenzado todo. Siempre nos quedará "Mad Men".

3 comentarios:

Ricardo Astrauskas dijo...

Huy ni modos, no he empezado a ver la 4 temporada porque me falta el ultimo de la tercera, así que voy muy atrasado.

Mónica Geller dijo...

Yo también me siento estafada.
¿De dónde salió el oso polar? ¿Qué pasó con Walt? ¿qué significan los números? ¿servía para algo pulsar la tecla? ¿quién es realmente Desmond? ¿Por qué al final todos tratan bien a Ben Linus cuando se portó toda la serie como un cabr....?
Y paro, porque si sigo acabaré pidiendo que me indemnicen por todo el tiempo perdido viendo la serie y acabar con todas estas preguntas sin respuesta.

Carolink dijo...

hasta donde yo recuerdo (y no he terminado de ver la serie todavía) el oso polar era uno de los bichos que tenían los de Dharma en las jaulas... De lo demás nada sé. Salud!